Asociado a su sabor refrescante, el limón, presente durante todo el año y rico en vitamina C, es el protagonista de esta riquísima tarta que no necesita de horno
INGREDIENTES
Para la base de la tarta
- 1 Paquete de galletas María (32 unid)
- 70 gr. Mantequilla
Para la crema de limón
- 4 Limones
- 250 gr. Azúcar
- 4 Huevos
- 100 gr. Mantequilla
- 2 hojas de Gelatina
Para la superficie
- 1 sobre de Gelatina con sabor a limón
- Agua
PREPARACIÓN
1) Lo primero que haremos es la base de la tarta. Para ello, echamos las galletas en el vaso y las trituramos 20 segundos a velocidad 6. Posteriormente, añadimos la mantequilla, que debe estar a temperatura ambiente, y mezclamos a la misma velocidad durante 10 segundos más. Vierte la mezcla en un molde desmontable.
Ten en cuenta que la base debe quedar uniforme y bien compacta, para lo que nos valdremos de una cuchara grande con la que ir presionando e igualando Por cierto, no te pierdas este pequeño truco que facilitará el desmoldado de la tarta y la posterior limpieza del molde. Deja la base en el frigorífico para que se vaya endureciendo.
2) El segundo paso es hacer el relleno, así que coges los limones -pelas la piel de tres de los cuatro- y los exprimes. Tiene que salirte en torno a 200 ml de zumo de limón.
Mete la piel del limón que utilizaremos para decorar en el vaso de la Thermomix y rállalo durante 10 segundos a velocidad 7-8. Sacas y reservas. Ahora echas el azúcar y programas 20 segundos a velocidad progresiva de 5 a 10. Añades las dos pieles restantes de limón, que deberá llevar la menor parte blanca posible, y vuelves a programar, en este caso a 30 segundos también a velocidad progresiva 5-10. Sumas el zumo de limón, la mantequilla y los huevos, batimos 10 segundos a velocidad 3 y programamos 10 minutos, a 80º de temperatura y velocidad 2.
Transcurrido el tiempo abre el vaso y introduces las dos hojitas de gelatina, que antes habremos hidratado en un poco de agua, y programas 40 segundos a velocidad 4.
3) Por último haremos la gelatina de limón, que nos servirá para decorar y dar brillo a la tarta. Lo haremos sin Thermomix. Simplemente echas un vaso de agua (200 ml) en un cazo, cuando comience a hervir añades el contenido del sobre de gelatina, mueves bien para que se disuelva y entonces añades un segundo vaso de agua fría. Vuelves a mover y apartas.
Con mucho cuidado vas volcando la cantidad que veas conveniente encima de la crema de limón, una fina capita será suficiente, y decoras con la ralladura de la piel de limón reservada distribuyéndola uniformemente por toda la tarta. No la eches toda, pues daría un sabor excesivamente ácido. Utilízala sólo para decorar.
Metes en el frigorífico y dejas enfriar un minimo de tres o cuatro horas antes de comer.
OBSERVACIONES
- Como no utilizarás toda la gelatina de limón puedes aprovecharla para hacer porciones individuales.
- Si no quieres un sabor demasiado ácido decora la tarta con la gelatina pero no eches la ralladura de limón.
¿Te gustó esta tarta? Pues si no tienes Thermomix mira la receta tradicional. También puedes dejarte seducir por estas otras: Tarta de chocolate negro con queso mascarpone, Tarta de queso con mermelada de arándanos y Tarta trufada.
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